Colegio Montessori en Cuernavaca, clases de yoga.
Colegio Montessori en Cuernavaca, mas que una clase de yoga.
Las clases de yoga en éste colegio Montessori en Cuernavaca, son especiales en verdad. Beatriz Legorreta, directora y guía del único grupo que posee éste maravilloso colegio Tierra de niños Montessori school, mejor conocida como ¨Tichi¨, da ésta clase de yoga a los niños de su grupo de una manera extraordinaria.
Las clases de yoga en Tierra de niños, mantienen la filosofía de la escuela:¨Estamos aqui para ser felices¨, llevando a cabo de manera coherente éste lema tan importante y a la vez tan profundo, la clase de yoga invita a los niños a estar en silencio y a desarrollar una consciencia real de la importancia de la respiración y del estar con la columna recta. Se inicia la clase buscando entre todos un motivo de ayuda para ofrecer la práctica, como puede ser: por los enfermos, por los niños pobres, por quienes no tienen papás, por los niños enfermos de cáncer, etc. Se canta el sonido sagrado: Om. Y se comienza la clase con una canción en donde los niños disfrutan, entran en calor y cantan. Posteriormente se practicarán 3 o 5 saludos al sol y después se cuenta un cuento. Estos cuentos que se relatan, son elegidos cuidadosamente según las circunstancias y las necesidades del momento, para ayudar a ¨ver¨mas allá de lo cotidiano, ya que éstos cuentos que son de diferentes partes del mundo, involucran el despertar de la conciencia de algún valor humano como la tolerancia, la generosidad, la escucha, que nuestras acciones importan, el respeto, entre otros. Los niños escuchan el cuento y después llevan a cabo diferentes posturas caracterizando a los personajes del cuento. Ellos ayudan a contar el cuento.
OTRAS ACTIVIDADES.
Otras actividades que se llevan a cabo son practicadas de otra forma, con otros materiales como pueden ser libros, tarjetas y cantos.
LAS TRES REGLAS.
Las tres reglas mas importantes durante la clase de yoga para lograr establecer un ambiente de paz y de respeto son:
1- Levanto la mano si quiero hablar, y solo si es muy importante, ya que si queremos escuchar a nuestro corazón, necesitamos estar calladitos. Como una de las niñas dijo: ¨Porque si no, ¿ como vamos a saber como estamos, si no estamos en silencio?
2- No jugamos con el tapete de yoga, ya que es para hacer yoga, no para hacerlo taquito.
3- No nos esculcamos los pies durante la clase de yoga, eso se hace después de habernos dado un baño en nuestra casa.
CIERRE DE LA PRACTICA.
El cierre se lleva a cabo con un ritual que los niños ya conocen: después de estar en shavasana, la postura del muerto, unos minutos, Tichi los checa para revisar si están bien relajados, se toca algún instrumento de larga sonoridad una sola vez, y despacito se invita a los niños a sentarse y a poner las manos cerca del corazón con las piernas cruzadas. Se canta alguna canción para atraer una vez mas su atención, se recuerda la ofrenda de la práctica y se cierra cantando una vez mas el Om.
Los niños terminan en un estado de paz y calma, motivados y contentos.
